El ser humano es un ser religioso. Por más que se quiera negar, es claro que la vida humana consiste en "servir" a aquello que demanda nuestra lealtad y consume nuestras energías. Pero no debemos dejarnos engañar por la confusión religiosa que marea a muchos con su cacofonía de voces diferentes. La Biblia nos enseña que la realidad no es complicada: sólo existen dos religiones, la que sirve y adora al Creador, y la que sirve y adora la creación.
El libro explora fundamentos de la religión revelada en las escrituras. Con preguntas de reflexión al final de cada capítulo, podría ser utilizado para estudios de jóvenes y adultos.